En 2012 fuimos comisionados por la Universidad Autónoma de Chihuahua para desarrollar el Plan Maestro para el nuevo campus en la ciudad de Parral y del cuál la Facultad de Medicina fue punta de lanza.

El proyecto consta de 3 volúmenes que incluyen aulas, laboratorios, morgue anfiteatro, biblioteca, una sala de maestros y espacios comunes que se encuentran unidos a través de puentes metálicos que cuelgan de la losa de un gran vestíbulo común de acceso.

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Con la finalidad de obtener la mayor cantidad de luz natural durante el día para minimizar el uso de iluminación artificial decidimos orientar la fachada más larga hacia el sur, sin embargo es importante destacar que también es necesario evitar la radiación solar directa, ya que puede calentar demasiado los espacios durante el verano.

Para solucionar dicha problemática diseñamos una celosía a base de perfiles de acero que reduce considerablemente la radiación solar directa durante el verano, pero que en invierno permite que dicha radiación permée a nuestros espacios debido al ángulo de inclinación de sus elementos.

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El diseño tuvo éxito al integrar a los miembros de la facultad de todos los niveles, incluidos estudiantes, maestros y el director, con la finalidad de garantizar una valiosa experiencia social y de aprendizaje a la vez que se tomaron consideraciones de carácter medioambiental al explorar el concepto de edificio pasivo-usuario activo. 

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Tomando en consideración las particularidades del terreno, entre ellas la pendiente del terreno, la orientación, los materiales y el clima, este edificio se asegura de proveer el uso consciente de energía y de recursos renovables.